domingo, 10 de julio de 2011

Derróte al Gigante

Eso fue lo que escuche cuando fui y hable con una amiga especial, aquel día entendí que soy fuerte como un león cuando Dios y yo peleamos la batalla, que Dios me ha dado muchas armas y me ha vestido de una coraza tan fuerte que nada ni nadie puede atravesarla. Las armas que Dios me ha dado son su palabra santa y limpia, el ayuno y la oración…vaya que no son pocas, que bendición.
Mi Dios en quien confié hace mas de 15 años es el mismo quien me habla hoy y quien me pide fortaleza, estoy convencida que sin el nada habría logrado, acepto ser fuerte, acepto vencer mis gigantes y ser una mujer de victoria y propósito.
El camino es duro y lleno espinas y piedras pero hay una esperanza, esa esperanza es Jesús quien tiene la respuesta para vencer mis tumores, angustias, aquello que aflige mi corazón y no me deja dormir, aquello que no sé que es,  pero está ahí estorbando y deteniendo mi crecimiento espiritual,  hoy vencí al gigante más grande el resto será más fácil derribar al resto. Entendí que faltan muchos gigantes por derrotar en mi vida, ahora lo sé, conozco quienes son, como visten y como se llaman, he aceptado que los tengo pero que ellos no son más fuertes que mi Dios, no lo son.
He decidido de aquí para adelante poner mi mirada en mi Dios, mis ruegos hacia El, he sentido que me escucha…siento su amor y su consuelo. Cuando mis lagrimas caían Dios era quien limpiaba mi rostro fue hermoso sentirlo, el amor de este mi Dios es lo que ahora llena mi vida y mi corazón.
Las palabras de un buen amigo quien también ama a Dios con todo su corazón me animan, me da las fuerzas que necesito para seguir, siempre que lo escucho hablar de El siento su amor y su cariño por Dios tan maravilloso….gracias querido amigo por regalarme tu tiempo y  tu amistad, eres muy importante para Dios y para mi.

1 comentario: